martes, 24 de marzo de 2009

Oye












W. B. U.

-Oye…, soñé contigo…- se atrevió a musitar, con una voz que sonaba a excusa, cuando ella se puso de pie para tomar rumbo a casa. Es que, en verdad, la fiesta iba en franca decadencia.

Ella detuvo el movimiento de su cuerpo por una fracción de segundo. A él este gesto, casi imperceptible, le pareció absolutamente esperanzador…, pero ella ordenó su pelo con los dedos de su mano derecha y continuó avanzando, dándole a su vida la naturalidad de siempre.

FIN

sábado, 21 de marzo de 2009

Esclavo tuyo




W. B. U.

Esto que tengo aquí no es mío, ya es tuyo,
esto caliente, esto húmedo…
Esto que tengo aquí no es mío, ya es tuyo,
esto brioso, esto duro…
Esto que tengo aquí no es mío, ya es tuyo,
esto potente, esto espúmeo…
También este infinito que quería darte y que ya te he dado,
este sueño,
este espacio entrañable que los dos compartimos,
por eso te digo que esto que tengo aquí ya no es mío, es tuyo…

Es tuyo porque te lo has ganado,
en el fragor de las beligerancias
de nuestros cuerpos y nuestras almas,
donde todo se pierde, todo se gana.
Esto que tengo aquí no es mío, es tuyo,
esto que has conquistado casi con alevosía,
cautivando mis noches y liberando mis días.

Esto que tengo aquí, mis ansias y mis tiempos,
ya son todo tuyos,
porque he vendido mi alma a tu pasión,
a tus deseos y a tus guiños.
Ya no soy nada, porque todo te lo he dado,
me he rendido.
Hoy sólo tengo un tórrido pasado,
contigo.
Ya no alcanzo a soñar mi futuro…
Ya no soy nada,
salvo el bendito esclavo tuyo…

viernes, 20 de marzo de 2009

Soneto VIII, De cómo una chica quería amar a su novio

























W. B. U.

Quiero cantarle al mundo loco toda mi verdad
a pesar de los riesgos y de las hipocresías
quiero amarte todo, sin falacias sin falsías,
quiero amarte día y noche en total libertad.

Tengo un amor de agua, amor de océano
para entregártelo en pasiones desbordantes,
entre mágicas espumas y olas delirantes,
ven a buscarlo a lo profundo de mi piélago.

Pero mantengo el miedo del tiempo majadero
a pesar de los años, no quiero que se te olvide,
por eso te vuelvo a decir todo lo que quiero:

Perderme sumisa entre tus benditos confines
para grabar tu tierna sonrisa en mi recuerdo
y poder hacerte el amor como los delfines.

domingo, 15 de marzo de 2009

Soneto VII, Del cambio que experimentó una mujer al ser acariciada


















W. B. U.




¿Qué te habrán hecho mis manos, Carita de Ángel,
para que buscaras guardar en tu piel mis caricias?
Quizás los susurros de mi boca eran albricias,
quizás las palabras que dijiste serán tu cárcel…

¿Qué te habrán hecho mis besos, amor de amores,
para que pensaras en no dedicar más tus labios
a expresar las palabras y pensamientos sabios
que llenan el jardín de mi alma con bellas flores?

Yo quería robarle un beso a esa boca
y quitarle a la mía el sabor de angustia
pero ya viste como mi beso te dejó loca

y esa locura recia dejó mi alma mustia
convirtiendo mi blando espíritu en la roca
que desde ahora rehúsa recibir tu ostia.

lunes, 2 de marzo de 2009

Quiero guardar la luz de luna en mi bolsillo


W. B. U.

Quiero guardar la luz de luna en mi bolsillo
para curar ese loco corazón que tienes,
latiendo descontrolado, cuando vas y vienes,
encandilándome, hasta cegarme con su brillo.

“La luz de luna -proclamaba el vate Sabines-
alivia a los intoxicados de filosofía”,
por eso la atesoro con extrema porfía
y la tengo para cuando, necesario, lo estimes.

Da la llave de la luna a los desencantados
y guarda celosa un riguroso silencio.
Ella se pone a escuchar lo que no hablamos.

Quiero guardar su luz, pero la luna avanza
y se me escapa empujada por el viento
la cubren negras nubes, llega la desesperanza.